La Pantera rosa es una de mis películas favoritas. Cierto que ha envejecido un poco pero sigue siendo una buena película porque es el compendio del cine de humor que se hacía en aquellas fechas.
Es la afortunada conjunción planetaria cósmica de dos personalidades irrepetibles: el director Blake Edwards y el actor Peter Sellers. Edwards ponía al día la clásica comedia de los primeros tiempos: carreras, golpes, malentendidos, puertas de pasillo que se abren y se cierran... Todo con fundamento. Miembro de una familia de cineastas, su padre dirigió películas de cine mudo, Edwards vivió muchos rodajes, participó en otros muchos como actor sin nombre y sin parlamentos, escribió muchos guiones y después de este rodaje cinematográfico comenzó a dirigir para la televisión. Tuvo pues, una escuela formidable. Su camino como director a pesar de proceder de los thrillers de la televisión está marcado por la comedia. Fue un maestro del tempo. En los gags, que en el lenguaje del cine hace mención de los chistes cortos, hay que sostener el que tiene gracia, pero sin pasarse. Edwards lo bordaba. Como ejemplo valga una de las escenas finales: la persecución automovilística alrededor de la fuente que el mismo había visto rodar siendo joven.
Sellers era un actor ingles procedente de esa gran fábrica que fue la Ealing: ya lo entrevemos en El quinteto de la muerte. De ahí para arriba hasta que se encuentra con Edwards en una película, La pantera rosa, en cuyo reparto no figuraba al principio y en la que la cabecera de cartel eran David Niven, Claudia Cardinale y Capucine. Capucine no era actriz, era Top Model (*). Cardinale no era una gran actriz y Niven ponía su eterna imagen de gentleman y poco mas. Sellers llegó a interpretar en una misma película, Telefono Rojo, varios personajes como había hecho Alec Guinness en Ocho sentencias de muerte.
Surge la conjunción Edwards/Sellers y resulta el inspector Clouseau, que es una revelación, se come a la pantera rosa y al resto del reparto y aparece un mito rentable cinematográficamente: secuelas hasta decir basta. Edwards/Sellers no piensan que es casual y en medio ruedan otra desternillante película ajena al tema: El Guateque. Aquí la maestría de Edwards en el uso del tempo llega al máximo.
Ambos forzados por el tema económico rodaron varias secuelas pero, ya no era lo mismo.
La música es un punto y aparte. Henry Mancini compuso el famoso tema de La pantera rosa, pero también está en todas las películas de Edwards y por supuesto en las de la serie. Aunque también compuso para otros directores, el culmen de este simbiosis entre ambos está en el tema Moon River de la película Desayuno con diamantes.
(*) Posiblemente, Edwards la eligió para lucir los trajes de Yves Saint-Laurent que compraba con el magro sueldo de su marido, el inspector Clouseau. A Audrey Hepburn en Desayuno... la vistió Givenchy.
P.D. La marca de fabrica de Edwards en sus comedias está en el
rodaje de una fiesta o mas. Sucede también en La pantera rosa pero el record lo tiene con El Guateque en el que la fiesta ocupa toda la película.
ADDENDA: Ha fallecido George Kennedy un grande en el cine y la televisión, casi doscientas películas.
La música es un punto y aparte. Henry Mancini compuso el famoso tema de La pantera rosa, pero también está en todas las películas de Edwards y por supuesto en las de la serie. Aunque también compuso para otros directores, el culmen de este simbiosis entre ambos está en el tema Moon River de la película Desayuno con diamantes.
(*) Posiblemente, Edwards la eligió para lucir los trajes de Yves Saint-Laurent que compraba con el magro sueldo de su marido, el inspector Clouseau. A Audrey Hepburn en Desayuno... la vistió Givenchy.
P.D. La marca de fabrica de Edwards en sus comedias está en el
rodaje de una fiesta o mas. Sucede también en La pantera rosa pero el record lo tiene con El Guateque en el que la fiesta ocupa toda la película.
ADDENDA: Ha fallecido George Kennedy un grande en el cine y la televisión, casi doscientas películas.
Desternillante película de muy grato recuerdo. Que me remonta también a un programa de mi infancia como el Show de la Pantera Rosa. Otros tiempos.
ResponderEliminarEfectivamente,¡ Que tiempos aquellos ! una vez agonizantes los dibujos de Disney, la Television de aquellos tiempos era poco proclive a la producción de programas propios para su programacion. Quedaban eso sí el Correcaminos y Tom y Jerry posiblemente el comic mas violento de la historia.En esa tesitura y dado el éxito de la película alguien tuvo la genial idea de sacar dos spin off para rentabilizarla: el primero con los dibujos de los créditos que tuvo mucho éxito y larga vida, el segundo el mismísimo Clouseau que se desenvolvería en los comics y sucesivas películas. Hasta luego Lucas.
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